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Mostrando entradas de abril, 2018

DEL COLOR DE LA LECHE (Nell Leyshon) (04/04/2018)

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Pues sí, tenía que homenajearse a la mujer trabajadora porque la anterior reunión la celebramos el 8 de marzo y, claro, las damas reclamaron su parte de protagonismo que el bueno de Pablo Portillo concedió proponiendo este nuevo libro. Hay que decir que la obra fue aclamada por todos los presentes, cosa que se percibió en que casi hubo que echar a empujones a la mayoría que se negaba a dejar de rajar sobre tan interesante libro y nos daban las diez y las once, las doce y la una (bueno, me he arrancado por Sabina, pero no duró tanto, la verdad). Lo primero que se comentó fue que el libro a unos les recordaba a La familia de Pascual Duarte, a otros a Intemperie e incluso, por el lenguaje infantil, hubo quien mencionó a Las cenizas de Ángela. El debate fue tan profundo que hasta se discutió sobre el color del cabello de la protagonista; ¿blanco, o sea albino? ¿rubia muy clara?, lo cierto es que tenemos a una chica de 14 años con un defecto en una pierna, o sea coja, aunque la au

LA HERMANA DE KATIA (Andrés Barba) 05/03/2018

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De la mano de Manuel, lector incansable, Quijote de las letras, nos llega la hermana de Katia de la mano de la mismísima Katia, de la abuela debutando con Alzheimer, del meapilas de John Turner y de la p. madre (nunca mejor dicho) que parió a las dos; todo ella condimentado con la abuela y la tortuga Giac o como se llame y el fantasma de su hija Nuria. Novela dura, de ambiente barriobajero, sin principios ni moral mínima, que queda suavizada por la dulzura e inocencia de una adolescente de 14 años a la que entre todos hemos catalogado como un poco deficiente psíquica. ¡Vamos, que parece que tiene un puntito!, que nadie lo niegue porque doy fé de que así fue debatido y aceptado de modo unánime. Es ese punto de vista ingenuo el que nos conduce por una lectura tierna, adentrándonos con dulzura en el mundo de una madre prostituta y de una hija-hermana rebelde, lista y mal hablada, que por cosas del amor a un italiano ¡Ay, el amor!, decide comenzar a girar sus curvas desnudas alred